“El Señor peleará por vosotros, y vosotros callad.”
(Éxodo 14:14 NVI)
“No tendréis necesidad de pelear en esta batalla. Estad firmes, mantened vuestra posición, y ved la salvación del Señor de parte vuestra, oh Judá y Jerusalén. No temáis ni os acobardéis. Salid mañana contra ellos, y el Señor estará con vosotros.”
(2 Crónicas 20:17 NVI)
Ayer vi esto en Facebook:
“Por mucho que quieras abordar el tema, algunas cosas es mejor no decirlas. A veces, es necesario dar un paso atrás, permanecer humilde y dejar que Dios pelee la batalla.”
Odio el conflicto. Odio la confrontación. Pero si me presionas lo suficiente, contraatacaré. ¿Cuántas veces me he mordido la lengua para no decir algo que es mejor no decir? Más veces de las que puedo contar. Algunas personas dicen que soy una persona débil. Yo digo que soy un guerrero que sabe elegir sus batallas.
Pero, de cualquier manera, Dios está aquí luchando por mí. Él lucha por ti también. Me pregunto cuántas veces Jesús tuvo que morderse la lengua para no decir algo que era mejor no decir. Puedo imaginarme unas cuantas veces.
La próxima vez que quieras atacar con ira o frustración, detente. Respira profundamente y piensa en lo que estabas a punto de decir. Mi abuela solía decir que se pueden atrapar más moscas con miel que con vinagre.
Que tengas un día fabuloso.
Kathy KellerEscritora y guerrera de oración de Answers2Prayer Ministries
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Traducido por Pascal Lambert