Noche tras noche, mientras las ovejas malolientes dormían, los pastores cansados velaban por ellas. Pero esa noche sucedió algo extraño, realmente aterrador: apareció un ángel. Los pastores debieron haberse levantado de un salto y haberse secado los ojos, asegurándose de que no veían cosas mientras temblaban de miedo: “Pero el ángel les dijo: No tengan miedo. Les traigo una buena noticia que será motivo de gran gozo para todo el pueblo: les ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor” (Lucas 2:10-11 NVI).
¿Todo el pueblo? Esos somos nosotros. Esa buena noticia es para nosotros y el no tener miedo es un mensaje para nosotros también hoy.
Jesús es la Buena Noticia
Buena noticia: el mal puede pisotear con fuerza, pero Dios tiene la victoria.
Buena noticia: los valles por los que caminamos tienen un final.
Buena noticia: la soledad tiene como compañera a la esperanza.
Buenas noticias: Cuando las relaciones terminan en dolor, Jesús prepara un nuevo comienzo.
Buenas noticias: Porque cuando un diagnóstico devastador nos deja entumecidos, Su sanación ya ha comenzado.
Buenas noticias: Porque cuando el miedo y la ansiedad irrumpen, Él los está eliminando.
Buenas noticias: Cuando la depresión ataca, Su Palabra trae de vuelta la luz del sol.
Buenas noticias: No importa la oscuridad, Su luz brillará.
Buenas noticias: Cuando las cosas parecen desesperanzadoras, Él está trabajando en algo grandioso.
Jesús, el Cristo nació.
Pero Su nacimiento es solo el comienzo. Él murió para que nuestro castigo también muriera. Pero luego resucitó, para que podamos unirnos a Él en la gloria eterna… ¡y esa es una gran Buena Noticia!
Ruego que todos ustedes, a quienes amo entrañablemente, disfruten de una Navidad rica en la alegría que nadie puede quitar, la paz que no terminará y la esperanza que nunca se desvanece. ¡Feliz Navidad!
Artículo extra sobre el tema de hoy.
Janet P. Eckles
Enciende tu pasión por la superación
Traducido por Pascal Lambert